lunes, 26 de julio de 2010

Dá irreal.

Pero ¿por qué es "real" lo tangible y no lo inventado? O sea, la sucesión de imagenes mentales también ponen en funcionamiento los sentidos, los sentimientos. O a las imagenes le ponemos sentimiento o... no importa ahora. Es cuando sentís, ves, escuchás, sin que sea unicamente consecuencia de factores externos. A ese momento se lo está viviendo.
O también pasa cuando te depertás feliz después de algún sueño de colores o cuando te despertás desamparado después de vagar por algún abismo oscuro.
Al despertar estás en la "realidad" con resaca de la "realidad" del sueño.
¿Cuál de las realidades es la real?
(No acordarse de los sueños es una forma de defensa... o de suicidio).
El otro día me mataron.
Vivía por el centro en una casa antigua. La terraza estaba rodeada de aburridos edificios, siempre tan iguales, tan simétricos, siempre tan cuadrados... pero en frente no, enfrente había una plaza.
Estábamos ahí con una prima bebé, otra prima, mi hermana y mi hermano más chico cuando empezamos a escuchar ruidos ensordecedores. ¡Bombardeaban la ciudad! Frenaban aviones en el aire, se ponían en posición vertical y se entregaban a la gravedad. Explotaban al impactar.
Salimos de la casa, no sabíamos a dónde ir, pero en la casa no nos podíamos quedar.
(Me acabo de acordar que de chica veía un avión a punto de estrellarse contra mí. De frente, directo a mi cara. Lo veía en primer plano, sin zoom. Y abría los ojos. Abría los ojos cuando casi llegaba a mi nariz... Pero ¿quién sabe? capaz nunca antes había visto esto o, capaz sí, resucitó de alguna tumba oxidada en la memoria. Qué sé yo...).
Ya en la calle era todo un caos, la gente desesperada, corriendo, gritando. Nosotros también corrimos aunque sea para calmar la sensación de adrenalina en el cuerpo. Entramos en un banco Nación de techos altísimos, amplio como toda estructura antigua, los muebles eran de madera tallada (como el ropero que me mira de frente mientras escribo).
El banco era un lugar indestructible, sabíamos que ahí dentro no nos iban a lastimar, que el lugar era inmune al ataque exterior.
La bebé empezó a llorar, tenía hambre. Ahí dentro había un almacén (¿por qué había un almacén dentro de un banco? no sé). Nos acercamos para tratar de conseguir leche. Pero aprovechando la situación nos la querían cobrar cien pesos. ¿De dónde íbamos a conseguir la plata? ¡hijos de puta! ¡siempre haciendo negocios con la necesidad ajena! ¡es un bebé!
La bebé lloraba cada vez más mientras cerraban las puertas del banco, cientos de personas amontonándose, suplicando por entrar.
Le dije a mi hermana que iba a conseguir leche a algún lado, no sabía a dónde, pero que me esperaran. Del banco no podía salir por las puertas principales, así que empecé a recorrer el banco y como todo lo antiguo de hoy en día tiene sus reformas. Estaba conectado a un edificio.
Busqué la forma de llegar a la calle, alguna ventana, alguna salida de emergencia, pero eran todos pasillos de paredes blancas, como laberinto. Hasta que divisé la puerta de un ascensor, me acerqué a buscar las escaleras que suelen haber cerca.
Y, en ese momento, pasaron por al lado mío corriendo dos hombres jóvenes. Pero no corrían de la misma forma que la gente en la calle, corrían huyendo de alguien, eran ratones. Escuché unos pasos que venían del mismo lugar del que habían pasados los hombres y giré a ver: era un policía vestido de civil con una pistola en la mano. Enseguida me corrí del medio, me metí en el pasillo de al lado del ascensor y me agaché, miré a los dos que corrían que estaban por llegar al final del pasillo, igual tenían muchas opciones, muchas puertas y otros pasillos para elegir y huir. No estaban atrapados.
El policía al verme se detiene. Clava sus ojos duros y sin brillo en mí, y saboreando cierto placer que desconozco me sentencia "a vos también te estaba buscando". Me apunta y siento un ardor en la frente.
Así fue que me mataron.
Si hubiera podido elegir una forma de morir... hubiese preferido los aviones.
Abrí los ojos, estaba en mi cama. Los aviones en el cielo son ahora nomás una imitación Made in China de los pájaros.
Pero ¿si hubiera tardado un segundo más en abrir los ojos? ¿Si morirme en otra realidad me hubiera matado en todas mis realidades?
En el expediente hubiesen puesto: muerte súbita.
Sólo yo hubiese sabido que, en realidad, en otra realidad me mataron.


.=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=-=.