sábado, 29 de septiembre de 2007

(muchas puntas de lápices)

"TAAAAANTO VAGAR PARA NO CONSERVAAAAAR..
NUUUUUUNCA NAAAADAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA"
siendo, según el relojito, sábado 29 de septiembre 03.40 a.m. (va a aparecer otra hora, seguro) quiero dejar en claro que a peto lo quiero un montón.
eso nomás.
chau.

jueves, 27 de septiembre de 2007

JAJAJAJAJAJAJAJA

"Quiero hablarte. Después hablamos".

miércoles, 26 de septiembre de 2007

"Si tantas veces la pasé muy bien por no tomar
no sé por qué no puedo ya parar la sed
a la mañana cuando saco el perro
miro al almacén, me tanteo los bolsillos
y pienso: "con un peso ¿qué podré beber?"

Con un pesito pegué una birra
y me fió un Bordolino
encima, en casa, tengo un fasito
y encanutado otro pesito
por si la sed me vuelve a atacar.

Abrí la fresca por el camino
llegó a mi casa tan s{olo el vino

Abrí la puerta, de heladera, una cubetera
casé la viola, una chacarera me puse a tocar
No es que la vaya a pasar tan mal tomando
pero cada vez me cuesta más contarlo
me levanto y le lloro al espasmo
me abrazo al inodoro
me voy en una arcada
¡me siento una cagada!

Rompí el canuto, pegué otro vino
en la escalera con un vecino
le fuimos dando y lo liquidamos
y nos jugamos: otro fiado
la doña no se va a enojar.

La almacenera, medio cabrera,
nos regaló media petaca
al primer trago del agua ardiente
se fue mi mente a otro continente
y me dijo: "¡chau! ¡nos vemo' en la resaca!"

Mañana (mañana)
llenaré una palangana
(llenaré una palangana)
tirado en una cama
(tirado en una cama)
no lo pude evitar
(no lo pude evitar)
seguro (seguro), diré que esto me cansa
(seguro que me cansa)
me agarraré la panza
y después de una semana
volveré a tomar
volveré a tomar
volveré a tomar
volveré a tomar..

Mujer, si puedes tú con dios hablar
preguntale si yo alguna vez podré dejar de escabiar.
.(volveré a tomar)
..Laralá laralá
...Volveré a tomar
....Volveré a tomar
.....Volveré a tomar
Otra vez pasando por lo mismo
Yo sé que voy a volver a tomar" -> =oD

VIEJOU ♥.

jueves, 20 de septiembre de 2007

M.H.

¡FELIZ DÍA!

Vos estás antes que cualquier primavera.

Monté un video.

Distintas costumbres: sol que traspasa un cielo en penumbras.
Se fuma libertad.
Se respira felicidad.
Y es tanta que no la pod/quer/sab/és controlar.
Las venas van a explotar.
Rebalsa.
"Sin chicha, ni limonada".
Patricia y marihuana.

¡Qué pa(ra)isito!
No es raro que un pájaro vuele.
No es raro que un católico rece.
No es raro que un poeta recite.
No es sólo lo que quieras, sino de quién lo quieras.


No es raro que necesite que me necesites..

viernes, 14 de septiembre de 2007

Solíamos terminar en vuelos.

"Entrelazados
sobre la esquina
descolorida
flotamos ella y yo
que desfallezco entre sus dedos
de almendra el cielo
bajar es lo peor.
Sé que sonríe
con desmesura
sangre en los huesos
y a la cama otra vez
el sol se ha muerto
sobre los techos
entre mis piernas

con su lengua escribió:
"esclavizada a vos,

encadenada a vos:
la vida es un orgasmo eterno y cruel".
Voy como un ciego

mendiga besos
que todo lo que toca es el vapor
de ese cuerpo que jamás logré enfrascar
¿Viajar?

¿con mi balsa de cemento, capitán?
Sin vos me empiezo a ahogar
Ay, ay, ay.
Ay, hay otro naufragio sin mar
Hay ¡ay! a orillas de General Paz
Hay otro naufragio sin mar
Hay ¡ay! a orillas de General Paz
General Paz..
¿Hasta dónde te permitís volar?

Traspaso el túnel
cuelgan guirnaldas
se abren las puertas
y el monstruo de crayón.
¿Esos payasos me están siguiendo?
Corte que veo fantasmas
donde no hay.

El sol se ha mueeertoooooo
no es para meeeeeenooooos

sobre mi espalda
con sus uñas tatuó:
"esclavizada a vos,
encadenada a vos:
la vida es un orgasmo eterno y cruel".


Voy como un ciego mendiga besos
que todo lo que toca es el vapor
de ese cuerpo que jamás logré enfrascar
¿Viajar? ¿con mi balsa de cemento, capitán?
Sin vos me empiezo a ahogar
Ay, ay, ay, ay, ay, ay.
Ay, hay otro naufragio sin mar
Hay ¡ay! a orillas de General Paz
Hay otro naufragio sin mar
Hay ¡aay! a orillas de General Paz
General Paz
¿Hasta dónde te permitís volar?

Mundo apestado por roedores
que han extirpado sus colores
La ironía de los dioses
fue darnos los ojos de Borges.
Así no hay nada que decir
nada más que hacer
Nada de nada

Flotar sobre tu piel
Nada que escribir
Nada
Ni un papel
Nada de nada
Flotar
sobre el andén.

Ay, hay otro naufragio sin mar
Hay ¡ay! a orillas de General Paz
Hay otro naufragio sin mar
Hay ¡ay! a orillas de General


¡Extra! ¡Extra!
a orillas de General Paz
Hay otro naufragio sin mar
¡Extra! ¡Extra!
a orillas de General Paz
General Paz
¿Hasta dónde te permitís volar, volar, volar, volar?
Ay, ay, ay, ay, ay, ay, ay, ay.
¡Extra! ¡Extra!"

Canción de amor.

"Vino, mi buen amigo
ya no me importa si sos blanco o si sos tinto
te tomaremos, de corazón
en damajuana, en botella o en cartón"

martes, 4 de septiembre de 2007

La historia sin fin: la vacuidad.

Extrañas, queres, esperas.
Después extrañas extrañar, queres querer y esperas esperar.
Pero llega un punto en que no extrañas querer, ni esperar.
No queres esperar, ni extrañar.
No esperas querer, ni extrañar.

También te acostumbras a que se rían de vos, a las palabras sin actos que las sostengan.
Te acostumbras a hacer berrinches y después levantarte, a la rutina.
Te acostumbras a andar sin flores y el verde se vuelve un color más.
Te acostumbras, en cada noche, a ser un bicho bolita en algún borde del abismo del colchón y ya no sentís miedo, ni vértigo.
Te acostumbras a querer pintar el acostumbramiento con sobrazos de acuarela.
A querer calzarte el traje de payaso cada vez que el circo se va del pueblo, y a los payasos con sonrisas tristes.
Te acostumbras a dudar si cada recoveco de cada canción habla de él y las canciones ya no hacen mal, ni bien.. ni hacen.

Te acostumbras a dudar y no dudas que te acostumbraste.
Te acostumbras a encender bengalas en las balsas de cemento y a que no las vean.
Te acostumbras a su desinterés y ya no te interesa. Ni te interesan. Ni te interesa si rezan a sus dioses o si le son fieles.

¿Qué pasa cuando te acostumbras?
Como un muerto te acostas con las sombras en cualquier tumba.
(A las sombras también te acostumbras y no las ves oscuras.. y no las ves. A los muertos.. ya nos vamos reconociendo).

lunes, 3 de septiembre de 2007

"Conozco el dolor desde niño cuando bajaba corriendo, afiebrado, hacia la costa de las aventuras y me encontraba siempre con esa cárcel de rutinas en que consiste la vida.
Porque estamos aquí, en donde todo es dolor y todo nos resulta gratis porque el sol se quema todos los días como un bonzo que se suicida por tristeza.
En donde las sonrisas terminan siempre en puñaladas.
Y en donde el primer pez cuando tuvo hambre se convirtió en asesino.
El dolor de estar aquí, en donde los pájaros aprenden a leer y a escribir las leyes que prohiben volar.
Esos viejos flacos y orgullosos en el supermercado arrastrando un carrito vacío con los ojos bajos y en silencio.
Porque ellos creen que el silencio es de bravos.
Esos viejos muertos de hambre que trabajaron toda una vida y no se roban ni una uva.
Esos viejos que se cruzan con un muchacho rubio de pelo largo que no los porque va pensando en el futuro.
Porque este es un mundo de jóvenes que olvidan su origen y de viejos que no recuerdan el destino.
Pero si las moscas usaran corbata, si las balas cantaran blues, si el cielo sacudiera su viejo culo azul y las ventanas católicas de los edificios, explotaran.. igual, igual habría un anciano babeando fantasías sobre las piernas de una muchacha. E igual habría todos esos tipos con caras de clavo sonriendo por las calles del mundo.
En una tribu de monos, en una fiesta de esclavos, en una calle de zombies.
Yo no soy un hombre, soy un virus en tu mente.
Un hombre solo en un cuarto, regando una planta, sufriendo porque nadie le habla o nadie lo toca y sólo le cabe recordar.
O las camareras de los bares nocturnos de polleras cortas que van naufragando entre las brumas del deseo.
O las conversaciones de mis amigos, que antes soñaban ser héroes y ahora cobran un sueldo.
Están inyectando una jeringa de miedo en las venas del mundo.
Yo no siento ni pienso, yo no amo ni odio, yo no vivo ni muero y no puedes conmigo, soy un virus en tu mente.
Yo tenía veinte años y siempre estaba borracho en una pieza mugrienta, viendo reflejar mi rostro sobre la frías paredes del mundo, ahora tengo casi sesenta, y nunca lo .. nunca a un hombre encendido y llameante. Un hombre que cuando levantara la mano a encender un cigarrillo yo viera en sus ojos los ojos de un tigre, acechando en el viento el paso del tiempo para matarlo.
Siempre , los ojos del miedo, los ojos tristes de la nostalgia. En una tribu de monos, yo no siento ni pienso, en una fiesta de esclavos, yo no amo ni odio, en una calle de zombies, soy un virus en tu mente".
Enrique Symns.